Cuando llegan estas fechas veraniegas, todo el mundo se preocupa de cuidar su cuerpo, su pelo, su piel, pero ¿que pasa con nuestros dientes?…debemos prestarle también la atención que se merecen.
Lo fácil es pensar que con un simple cepillado después de cada comida es suficiente, pero tendrÃamos que tener en cuenta otros hábitos…detallamos algunos de ellos:
- Es conveniente utilizar irrigador o hilo dental para limpiar entre tus dientes.
- Si quieres utilizar un colutorio oral, consulta con el especialista antes de ello. Algunos de ellos no pueden usarse en determinados casos y otros no deben utilizarse de forma continua.
- Ademas de mantener una higiene correcta en los dientes, habra que hacer lo mismo con tu lengua y paladar, utilizando tu propio cepillo.
- Masajea tus encias con movimientos circulares en cada cepillado para evitar que se inflamen y sangren.
- Los cepillos dentales hay que cambiarlos cada 3 meses, pues las cerdas o filamentos pierden su forma y se despuntan. También debes consultar con tu dentista qué cepillo es más recomendable para tu boca…no todos son iguales, cada uno tiene su uso especÃfico.
- Evita cambios grandes de temperatura con los alimentos que ingestas, pues provocan aumento de la sensibilidad, y pueden llegar a producir inflamaciones de los vasos sanguÃneos del interior de tus dientes.
- Reduce al máximo posible el consumo de alimentos ricos en azúcares o bebidas azucaradas, pues las bacterias que producen caries se nutren de ellos.
- Disminuye el consumo de vino, café o té para evitar que tus dientes puedan teñirse y tengan un aspecto envejecido.
- El tabaco provoca la pérdida de permeabilidad de las mucosas, es decir, disminuye la oxigenación de la encÃa, dando lugar al envejecimiento prematuro y ausencia de salud de los tejidos que rodean al diente.
Recuerda que una boca sana, nos ayuda a mantener la salud general, al permitirnos masticar y tragar los alimentos eficazmente para absorber los nutrientes.